Durante los últimos 30 años la práctica de Mindfulness, también conocida como Atención Plena, está integrándose al campo de la medicina y psicología como técnica de relajación. Está considerado como una manera efectiva de reducir el estrés, mejorar la autoconciencia, minimizar los síntomas físicos y psicológicos producidos por el estrés y mejorar el bienestar general. El Mindfulness se puede entender como una filosofía de vida que incluye la práctica de la meditación. Junto a varias técnicas de relajación, su aparición es reciente.
Muchos personas sufren por el estrés que les provoca el trabajo y paradogicamente la propia sobrecarga de trabajo impide a muchas de ellar poder resolver el problema por falta de tiempo. Sin embargo, existen una serie de ejercicios que pueden realizarse desde casa.
Consejos para realizar correctamente el mindfulness en casa
-Elegir un espacio, un lugar y un momento del día en el que, con regularidad la persona pueda comprometerse a practicarlo. Debe ser una zona de la casa ordenada y limpia.
-Decidir con antelación, cuánto tiempo se va dedicar a los ejercicios y comprometerse a cumplirlo
-Variar la técnica de mindfulness y no realizar todos los días la misma
-Tener mucha paciencia y consideración con uno mismo y no espar resultados a corto plazo.La mente se entrena de la misma manera que el cuerpo lo hace en el gimnasio. No se puede esperar unos resultados espléndidos en poco tiempo. Hay que ser constante.
Ejercicios de relajación mindfulness para realizar en casa
1. Concentración en la respiración: Resulta el más sencillo de todos y puede realizarse en cualquier momento y lugar.Consiste en dedicar un minuto únicamente a concentrarse en la respiración. Se respirar con el vientre en lugar de con el pecho. Se toma aire por la nariz y se suelta por la boca. Para que funcione es necesario prestar atención al sonido y al ritmo de la respiración.
2. Concentración plena en un objeto: Consiste en coger un objeto de la vida cotidiana como puede ser un vaso de cristal o un lapicero y dejar que absorba toda la atención. Hay que dejar que la mente se concentre únicamente en el elemento que se mira o se escucha.
3. Contar hasta diez: Guarda cierta similitud con el ejercicio número 1. Solo hay que relajarse y contar lentamente hasta el número diez. A pesar de resultar muy sencillo, en muchas ocasiones se entremezclan otros pensamientos indeseados. Es muy útil para la relajación.
4. Centrarse en una llamada externa. Este ejercicio consiste en centrar la atención en la respiración cada vez que se pèrcibe una señal específica del ambiente. Por ejemplo, una llamada de teléfono. Simplemente se elige una señal ajena a la persona. Cualquier señar auditiva o visual es válida. Esta técnica se realiza para conseguir que, cuando se realiza la acción de enfocar la respiración, la mente viaje al presente y sea consciente de ello.
5. Escuchar música: Escuchar música es un relajante natural. Puede utilizarse como un ejercicio en sí mismo centrándose en cada vibración y cada nota o como acompañamiento de otra táctica mindfulness.
6. Limpiar la casa: El desorden, es un estresor muy importante a tener en cuenta en la vida de las personas. Limpiar la casa de manera consciente trae muchos beneficios mentales. Hay que ver las actividades domésticas como un ejercicio de alivio del estrés, no como una simple tarea.
7. Observación de pensamientos. Es el ejercicio más complicado y el que más concentración precisa. Se trata de sentarse y analizar los sentimientos que a uno le preocupan o le angustian pero sin sentir estos síntomas. Simplemente identificándolos y dejándolos pasar. El estrés no será eliminado como en los otros ejercicios, pero sí se reducirá.
Esta serie de ejercicios de conciencia se realizan para desarrollar la capacidad de transportarse al momento presente y son un buen modo de mejorar la capacidad de concentración. Practicándolos a menudo, resultará más fácil meditar.