Con cada vez más personas en el mundo, sobre todo personas trabajando que van a su empleo en coche, los caminos se congestionan más... el tráfico puede ser imposible. Dentro de los coches es más fácil sentirse aislado del mundo y olvidar que en los otros coches también hay otras personas con otras prioridades.
Esto puede hacer que seas menos amable con los demás mientras conduces, algo que sería totalmente diferente si conocieses a las personas que están en los demás coches. Si te tuvieras que enfrentar a nivel más personal es probable que no te pusieses tan agresivo/a al volante. Además, cuando te sientes frustrado en el tráfico, a veces las personas cometen errores o realizan maniobras de conducción descortés, lo que puede provocar el enfado de otros conductores frustrados y crear una cascada de hostilidad. Esto a menudo resulta en una ira en la carretera, que puede representar una amenaza importante para la salud y la seguridad de todos los conductores y peatones.
La rabia que puedas sentir en el camino y la conducción hostil puede ser común, pero esto hace que sea más peligrosa la conducción. Obviamente, la ira en la carretera puede hacernos más propensos a los accidentes. Sin embargo, también existen otros riesgos; las personas que experimentan ira en la carretera pueden enfrentar mayores riesgos para la salud que vienen de altos niveles de estrés, tensión y enfado. Estos episodios de estrés agudo pueden convertirse en estrés crónico, lo que conduce a muchos resultados negativos para la salud.
La rabia que puedas sentir en el camino y la conducción hostil puede ser comúnAdemás de la tensión de peaje en el cuerpo de la ira, el mayor riesgo de un accidente automovilístico debido a la ira de la carretera pone en riesgo a todos los conductores. Además, algunos incidentes se han vuelto violentos como resultado de la ira cotidiana de la carretera que se salió de control.
Si te conviertes en un conductor amable podrás reducir ese nivel de frustración que puede causar a otros conductores, pudiendo mantener a raya la ira en la carretera. Pero si experimentas ira mientras conduces y crees que no podrás controlarlo, hay algunas técnicas que puedes usar para mantener la calma en el coche. No pierdas detalle.
Cómo gestionar la ira al volante
Respira hondo
Los ejercicios de respiración te ayudarán a oxigenar tu mente y acabar con la energía negativa estancada en tu mente. Consigue que tu sangre se quede más oxigenada y libera esa tensión. Céntrate en tu respiración y así tu atención se centrará en tu interior proporcionando que las frustraciones parezcan más alejadas de tu mente.
Cuando te frustres al volante, estarás almacenando tensión en tu cuerpoEscucha
Escucha música o audiolibros. La música puede colorear sutilmente tus experiencias, añadiendo una emocionante banda sonora a tu viaje. Los audiolibros pueden proporcionarte una distracción leve que puede hacer que tu pensamiento sea lo suficientemente agradable como para que lo que ocurre en la carretera no sea tan molesto para ti.
Relájate
Practica la relajación muscular progresiva. Cuando te frustres al volante, estarás almacenando tensión en tu cuerpo. Las técnicas de relajación rápidas te ayudarán a aprender a liberar rápidamente la tensión que llevas, incluso cuando te sientas en el coche, lo que te ayudará a sentirte más relajado física y emocionalmente.
Ten un plan
Gestiona tu tiempo de forma sabia. A menudo, cuando estamos frustrados en la carretera, es porque tenemos prisa y no podemos llegar lo suficientemente rápido debido al tráfico. Organizar tu horario para que puedas salir antes de casa, y planificar para el tráfico el tiempo con suficiente antelación, puede hacer que te sientas más relajado porque realmente no importará tanto si el viaje toma algunos minutos adicionales... te sentirás más relajado al respecto y la ira no aparecerá.
Si tu conducción es placentera, entonces será mucho más seguro tanto para ti, como para los demás conductores.
