Las amistades al igual que las relaciones de pareja no siempre pasan por buenos tiempos, es por esto por lo que en ocasiones puede ocurrir que dos buenos amigos nuestros se enfaden y que nosotros nos veamos en la situación de tener que convertirnos en un mediador entre ellos.
Es por esto por lo que desde Bekia hemos preparado un artículo con todas las claves que deberás seguir para conseguir que tus amigos solucionen sus diferencias sin caer en el intento.
¿CUÁL HA SIDO EL MOTIVO DEL CONFLICTO?
Si realmente quieres ayudar a tus amigos a resolver un problema, lo primero que deberás hacer como mediador es identificar el motivo verdadero por el que ha surgido el problema. Para esto lo que deberás hacer es acudir a la raíz del conflicto, es decir a tus amigos. Claramente cada uno tendrá una versión de los hechos por lo que escuchar su punto de vista y que cada uno te explique con detalles que es lo ocurrido, te servirá para poder enterarte no solo del conflicto en sí, sino de las cosas que han hecho que tus amigos se molesten, o les duela lo sucedido.
Es importante que no te dejes llevar por terceras personas y que saques tus propias conclusiones por ti mismo, para así poder tener una opinión lo más objetiva posible.
HABLA CON ELLOS
Esto será mejor hacerlo individualmente y teniendo en cuanta la perspectiva de cada uno. Lo segundo que debes hacer una vez te hayas enterado de todo lo que ha ocurrido, es saber en qué punto emocional están tus amigos. Puede que uno sienta rabia, ira o esté frustrado mientras que otro puede que este triste, decepcionado o sin predisposición de arreglar lo ocurrido.
Como mediador deberás hacerles ver que lo mejor es que se tranquilicen, que dejen pasar el tiempo y que vuelvan a mirar la situación con una perspectiva un poco más fría: ¿Es realmente tan importante el problema? ¿De verdad quieren tirar años de amistad por este motivo? ¿Están seguros de que no quieren solucionarlo?
Lo mejor que podrás hacer es sembrar una semilla en ambos, la semilla de la reconciliación. Si ambos están muy enfadados porque el conflicto ha sido reciente lo mejor será esperar a que se tranquilicen y cuando lo estén, hablar con ellos calmadamente para intentar que lo solucionen.
HAZ QUE HABLEN ENTRE ELLOS
Una vez que las aguas estén más calmadas y que veas que en el fondo a ambos les da pena perder esa amistad o estar en esa situación por lo que ha pasado, lo que deberás intentar es que hablen entre ellos. Al final la raíz de un problema entre dos personas son los sentimientos, es muy probable que el conflicto no haya sido tan grande pero que los sentimientos que le han generado si que lo sean, probablemente uno este dolido mientras que el otro esté frustrado porque no entiende qué es lo que ha hecho tan grave para que la otra persona se ponga así.
Es por esto por lo que como mediador tienes que invitarles a que hablen, sin recriminar y sin echarse cosas en cara, lo que deberán hacer es hablar de sus sentimientos: "A mi me ha dolido lo que has hecho porque me he sentido utilizado por ti, quizás esa no era tu intención, pero yo lo he sentido de esta forma". "Me he enfadado porque no entendía porque te ponías de esa forma, yo no lo hice con esa intención, eres mi amigo y jamás te haría algo para hacerte sentir mal".
Esto son solo ejemplos, en donde podemos ver que no achacamos la culpa al otro sino a lo que hemos sentido.
NO TOMES PARTIDO
Es probable que, si hay un conflicto entre dos amigos tuyos, con uno de ellos tengas mejor relación o sintonía que con el otro, pero eso no debe ser un motivo para que te posiciones de una parte o de otra.
Tú debes ser un elemento conciliador y de paz no un desestabilizante ya que si tomas partido y tus amigos finalmente terminan solucionando sus diferencias, es posible que quien termine resultando el afectado seas tu mismo y que el estigma de mete mie*** te persiga durante toda la vida, a parte de que la relación con la otra persona no volverá a ser la misma nunca.
NO FUERZES LA RECONCILIACION
Algo que es totalmente contraproducente cuando tratamos de que dos amigos solucionen sus diferencias, es intentar forzar una reconciliación de forma apresurada. A nadie le gusta ver que dos buenos amigos suyos están enfadados, y más si esto supone dividirse o intentar quedar con unos y con otros sin que coincidan, pero si hay algo que no debemos hacer, aunque no soportemos la situación, es forzar una reconciliación.
Cada persona tiene sus tiempos, y lo mejor para que solucionen sus conflictos es que lo hagan cuando ambos quieran, no trates de crear una situación en la que ambos coincidan engañados para hacer que hablen, ya que esto provocará una situación incomoda y podrá hacer que se enfaden contigo.
¿ELLOS QUIEREN ARREGLAR LA SITUACIÓN?
Deberás ser consciente de que hay veces en la que dos personas no congenian la una con la otra, no todas las personalidades se atraen y eso en la amistad también pasa. Es posible que uno de tus amigos haga cosas que le hacen daño a otro sin darse cuenta, y que este cansado con la situación no quiera continuar la amistad porque no le beneficia. Si este es el caso debes entender que la otra persona quiera alejarse.
No obstante, es posible que en cuanto surja un conflicto las personas se pongan en lo peor y quieran terminar la amistad porque están en un punto caliente del enfado. Debes dejar que pase el tiempo y hablar con cada uno de ellos. Pregúntales qué haría falta para que solucionasen sus problemas y si ellos quieren hacerlo. Si la respuesta es que si ya han avanzado en el conflicto.
HAZLES VER LO BUENO DE SU AMISTAD
Es normal que, durante las discusiones, las personas solo se centren en los puntos negativos, es por esto por lo que hay que recordarles los momentos buenos y bonitos que han tenido su amistad.
Intenta, (sin que se ofendan) quitarles hierro a los problemas y hacerles ver que los momentos buenos les ganan a los malos, para que así puedan recordar por qué son sus amigos y por qué no deben dejar de serlo.
RESPETA LA DECISIÓN FINAL
En el caso de que hayamos intentado por todos los medios que solucionen sus conflictos y esto no ha sido posible, lo único que nos queda es aceptar su decisión y entender que no todas las personas pueden ser amigas. Así mismo trata de no tomar partido y de pasar un tiempo equitativo con cada uno de ellos a partir de ahora.