Quizá te sientes culpable por algo que has hecho en tu vida y no eres capaz de perdonarte. El perdón a menudo se define como una decisión deliberada de acabar con los sentimientos de ira, de retenimiento o de frustración hacia algo o alguien que te ha perjudicado. Es posible que seas una persona generosa en cuanto al perdón hacia otras personas, pero quizá seas más duro contigo mismo.
Todos cometemos errores, pero aprender de ellos y acabar con los sentimientos negativos que te genera es importante para tu salud mental y tu bienestar en general. Es necesario que sepas que es posible perdonarte a ti mismo y que además es beneficioso en todos los aspectos en tu vida. Serás mejor persona si te comienzas a perdonar esos errores que has cometido y que tanto te atormentan.
Por qué te cuesta perdonarte
Si tú tienes que estar bien contigo mismo, ¿qué es lo que hace que sea tan complicado para ti a veces conseguirlo? ¿Por qué hay personas que se siguen castigando y repitiéndose lo mal que lo han hecho en lugar de aprender de ello y avanzar? Cuando se cometen errores que no son propios de los valores que tenemos pueden aparecer sentimientos de culpa o arrepentimiento... o lo que es peor, ¡aversión a nosotros mismos!
Hay varias razones por las que perdonarte a ti mismo puede ser complicado:
- Emociones. Puedes experimentar culpa o vergüenza sobre tus pensamientos o sentimientos. La ira, la envidia, la codicia o la lujuria también son emociones que pueden provocarte arrepentimiento o culpa. Perdonar estas emociones puede ser complicado porque cuando te ocurren eres consciente de ellos.
- Pensar demasiado. Algunas personas de forma natural piensan demasiado y esto puede provocar que tengan demasiados pensamientos negativos. El perdón consiste en reconocer las faltas y admitir que es posible que se deba cambia, y pensar en esto puede ser complicado si no se está preparado aún para cambiar.
El bienestar psicológico y el perdón comparten interconexiones
Es sabido que el bienestar psicológico y el perdón comparten interconexiones. Las personas con altos niveles de estrés tienen una salud mental deficiente. Las personas que son capaces de perdonar tienen una mejor salud mental, incluso si también experimentan estrés.
El perdón tiene una serie de beneficios en la mente que ayudan a que se reduzcan los síntomas de depresión, ansiedad y otras afecciones mentales. El principal beneficio es dejar la ira a un lado que ayuda a que el estrés se disminuya. Si eres capaz de reducir tus niveles de estrés tendrás mejor salud y más energía.
Por si fuese poco, si eres capaz de perdonarte a ti mismo también tendrás menos probabilidades de experimentar otros síntomas de salud física negativos y ¡vivirás más tiempo! Los sentimientos de ira y hostilidad están relacionados con tener una peor salud.
El perdón hacia ti mismo
Si eres capaz de perdonarte es una acción positiva y te ayudará a restaurar el sentido del yo. Pero no todo es tan bonito... el perdón a uno mismo puede ser perjudicial e inadaptado si se tienen comportamientos problemáticos. Por ejemplo, si tienes adicciones y te perdonas por haber cometido un consumo de estupefacientes, no tendrás la motivación suficiente para cambiar.
Perdonarte no significa que ignores el problema que tienes delante. Es algo más que dejar atrás el pasado y seguir hacia adelante... se trata de aceptar lo que ha sucedido, mostrar compasión por ti mismo y cambiar hacia una mejor versión de tu persona.
Perdonarte a ti mismo no es una señal de debilidad, ¡todo lo contrario! Significa mostrar empatía y comprensión cuando no es fácil conseguirlo... en muchos casos, conceder el perdón a uno mismo es mucho más difícil que permitirse revolcarse en la ira o el arrepentimiento.
Recuerda que perdonarte no significa dejarte llevar. El acto de perdonar a ti o a otros, no significa que se tolere el comportamiento indeseable. Significa que aceptas el comportamiento, lo que aja sucedido y que estás dispuesto a superarlo y a seguir hacia adelante con tu vida, permitiéndote aprender de los errores y cambiar a mejor.