Es normal que te sientas mal contigo mismo de vez en cuando, le pasa a todo el mundo, pero ¿es solo un mal día o hay un problema mayor? Quizá no te quieras realmente y debas empezar a darte cuenta para poder realizar los cambios pertinentes en tu vida. Hay personas que experimentan baja autoestima durante mucho tiempo y eso les hace sentir mal consigo mismos.
Son muchas las cosas que pueden hacer se tenga esa perspectiva negativa de uno mismo, como ser acosado en la escuela primera, vivir ansiedad por motivos familiares o padecer negligencia en el propio hogar.
Muchas personas que enfrentan una visión negativa de sí mismos han experimentado esto debido a algún tipo de trauma en sus años más jóvenes. Este tipo de autodesprecio también puede ser el resultado de una experiencia negativa en la edad adulta. Es importante que las personas se quieran como se merecen.
Es normal que te sientas mal contigo mismo de vez en cuandoTener amor por uno mismo es esencial para ser feliz
Tener amor verdadero por uno mismo es esencial para ser feliz. Si no te quieres a ti mismo no podrás querer a los demás, y esto es muy cierto. Si te odias a ti mismo, es poco probable ue te enfrentes al maltrato o recibirás críticas innecesarias.
Es más probable que te conformes con menos de lo que mereces. Por otro lado, si te amas a ti mismo, te sentirás seguro de estar en desacuerdo con tu pareja o amigo, y sabrás que está bien. No te quedarás con cualquiera, ni sacrificarás tus sentimientos y opiniones para llenar un vacío. Proyectarás confianza y serás exitoso en toda tu vida.
Entonces, ¿cómo puedes saber si tienes una visión dañina de ti mismo, en lugar de solo un mal día? Aquí hay algunas pistas para tener en cuenta. Piensa que esta no es una lista exhaustiva... pero te ayudará a hacerte una idea.
Es más probable que te conformes con menos de lo que merecesTienes un diálogo interno negativo constantemente
Si constantemente te estás hablando mal a ti mismo, estás participando en lo que los psicólogos denominan diálogo interno negativo. Estos patrones son increíblemente perjudiciales para tu autoestima y, además de sentirse mal contigo mismo, también puede tener muchas consecuencias devastadoras, como caer en las adicciones. El diálogo interno negativo juega un papel primordial en no quererte realmente a ti mismo.
Cuando no te preocupas por ti mismo como deberías, eres capaz de criticarte de manera excesiva, esperar la perfección o incluso ser duro contigo mismo por las cosas más triviales. Una cosa es exigirte por la excelencia y otra cosa muy diferente criticarte solo con palabras negativas y demasiado duras.
Por ejemplo, una persona con un diálogo interno negativo, quizá haga una broma en grupo con buena voluntad pero después piense que los demás se sienten ofendidos. Esto le puede causar ataques de pánico y ansiedad e incluso puede insultarse y pedir disculpas innecesarias a los otros. Si esto te ha ocurrido alguna vez, entonces deberás empezar a valorar los pensamientos negativos que afloran en tu mente.
Obviamente, hay muchos más escenarios en los que puedes participar en un diálogo interno negativo, y darte cuenta de esto es el primer paso para el cambio interno que necesitas. Al desafiar los pensamientos que tienes y trabajar para cambiar tu mentalidad y sentimientos sobre ti mismo, podrás cambiar este patrón. Si necesitas ayuda de un profesional capacitado para hacer esto, no tengas ninguna vergüenza en buscar ayuda. Puedes buscar un psicólogo que esté especializado en terapia cognitiva conductual (TCC).
No te defiendes ni evitas conflictos
Cuando te sientes mal contigo mismo, puedes pensar que no eres amable. Debido a esto, particularmente en las relaciones, es posible que no te defiendas en casos de maltrato. Además, si no estás de acuerdo con tu pareja y expresas tus diferencias, cuando te lo cuestiones, puedes retractarte de inmediato de tu opinión o aclarar lo que "realmente quisiste decir".
Recuerda que todas las personas cometen erroresEstás llenando un vacío negativamente
Si tienes baja autoestima, puedes recurrir al alcohol, las drogas, el juego, el sexo o una gran cantidad de otros comportamientos negativos para llenar ese vacío de amor en tu vida. Si crees que puede tener un problema con una sustancia o comportamiento, es probable que lo tengas. Habla con alguien y busca ayuda.
Te encuentras conformándote en cualquier área de tu vida
¿Estás atrapado en un trabajo que odias, pero sientes que no será contratado en ningún otro lugar? ¿Estás con alguien que no te hace sentir amado o es abusivo, pero sientes que no puedes hacerlo mejor? ¿Ocultas el comportamiento negativo de tu pareja (adicción, abuso, etc.) porque tienes miedo de que las personas te animen a dejarlo y no puedes soportar estar solo? Todas estas cosas pueden indicar que te estás conformando con menos de lo que te mereces.
Puedes cambiar tus pensamientos y convertirte en una persona mucho más saludable y feliz. Amarte a ti mismo puede llevar tiempo, pero debes saber que es posible. Si necesitas servicios de asesoramiento para hacerlo, solo tienes que buscarlos. Sentirte bien contigo mismo te dará libertad y felicidad, y una vida mucho mejor en general.
Cree en ti
Lo realmente importante en todo esto es que seas capaz de confiar en ti, en saber que eres capaz de hacer las cosas por ti mismo. Si en algún momento te equivocas o tomas malas decisiones, no tienes que hundirte, la realidad es que esas malas decisiones o errores te están haciendo crecer como persona y te ayudan a aprender para hacer las cosas mejor en el futuro... son sin duda, un buen regalo de la vida, aunque al principio te parezcan todo un castigo.
Recuerda que todas las personas cometen errores y que incluso los errores más grandes son los mejores descubrimientos de la historia. Si algo te sale mal, lo único que necesitas es voluntad de cambio y perseverancia. Cuando te des cuenta de que eres capaz de conseguir aquello que te propones, entonces tu autoestima empezará a crecer como la espuma, pero para que no se rebaje demasiado rápido... ¡mantén tu amor propio a buenos niveles! Eres una gran persona y debes tratarte cómo te mereces, ¡no esperes menos!
