El lenguaje no verbal o lenguaje corporal proporciona mucha información sobre lo que se piensa sin necesidad de pronunciar una palabra. La comunicación entre las personas es mucho más rica de lo que te puedes imaginar y las palabras no siempre son los protagonistas. Los gestos, las miradas o los movimientos corporales también tienen mucho que decir en estos casos.
Las personas captan más señales de lenguaje no verbal de las que son conscientes, de hecho solo le 7% de la comunicación se basa en las palabras que se dicen. El 30% proviene del tono de voz y el 55% restante del lenguaje corporal. Tomar conciencia de esto te ayudará a mejorar tu comunicación en todos los aspectos. Además, cuando trabajas duro y haces todo lo que puedes para alcanzar tus objetivos, cualquier cosa que pueda darte una ventaja es poderosa y simplificará tu camino hacia el éxito.
Las personas con alta inteligencia emocional entienden mejor el lenguaje no verbal y también lo controlan en consecuencia. La próxima vez que estés en una reunión (o incluso en una cita o jugando con tus hijos), puedes estar atento a las siguientes señales porque te indicarán cosas que las palabras no describen.
Las sonrisas reales arrugan los ojosBrazos y piernas cruzados
Cuando los brazos y las piernas están cruzadas, indican resistencia a las ideas. Los brazos y las piernas cruzadas son barreras físicas que sugieren que la otra persona no está abierta a lo que estás diciendo. Incluso si sonríes y participas en una conversación agradable, tu lenguaje corporal cuenta otra historia.
Psicológicamente, las piernas o los brazos cruzados indican que una persona está mental, emocional y físicamente bloqueada de lo que tiene delante. No es intencional, por eso es tan revelador.
Sonrisas de verdad
Las sonrisas reales arrugan los ojos. Cuando se trata de sonreír, la boca puede mentir pero los ojos no. Sonrisas genuinas llegan a los ojos y arrugan la piel para crear patas de gallo a su alrededor. Las personas a menudo sonríen para ocultar lo que realmente piensan y sienten, así que la próxima vez que quieras saber si la sonrisa de alguien es genuina, busca arrugas en las esquinas de sus ojos. Si no están allí, esa sonrisa está ocultando algo.
Las personas a menudo sonríen para ocultar lo que realmente piensanCopiar el lenguaje corporal
¿Alguna vez has estado en una reunión con alguien y has notado que cada vez que cruzas o descruzas las piernas, ellos hacen lo mismo? ¿O tal vez inclinan la cabeza de la misma manera que la tuya cuando hablas? Eso es realmente una buena señal. Reflejar el lenguaje corporal es algo que hacemos inconscientemente cuando sentimos un vínculo con la otra persona. Es una señal de que la conversación va bien y que la otra parte es receptiva a su mensaje. Este conocimiento puede ser especialmente útil cuando está negociando, porque le muestra lo que la otra persona realmente está pensando sobre el acuerdo.
Las personas con alta inteligencia emocional entienden mejor el lenguaje no verbalLa postura
¿Alguna vez has visto a una persona entrar a una habitación e inmediatamente has sabido que era la encargada? Ese efecto se debe principalmente al lenguaje corporal, y a menudo incluye una postura erguida, gestos hechos con las palmas hacia abajo y gestos abiertos y expansivos en general. El cerebro está creado para equiparar el poder con la cantidad de espacio que ocupan las personas.
Ponerse derecho con los hombros hacia atrás es una posición de poder; parece maximizar la cantidad de espacio que llenas. Agacharse, por otro lado, es el resultado de colapsar tu forma; parece ocupar menos espacio y proyecta menos energía. Mantener una buena postura exige respeto y promueve el compromiso, seas líder o no.
Ojos mentirosos
La mayoría de nosotros probablemente crecimos escuchando: "¡Mírame a los ojos cuando me hablas!" Nuestros padres estaban operando bajo el supuesto de que es difícil mantener la mirada de alguien cuando les mientes, y tenían razón en cierta medida. Pero ese es un conocimiento tan común que las personas a menudo mantienen contacto visual deliberadamente en un intento de ocultar el hecho de que están mintiendo.
El problema es que la mayoría de ellos compensan en exceso y mantienen el contacto visual hasta el punto de sentirse incómodo. En promedio, las personas mantienen contacto visual durante siete a diez segundos, más tiempo cuando escuchamos que cuando hablamos. Si estás hablando con alguien cuya mirada te está haciendo retorcer, especialmente si está muy quieto y sin parpadear, algo está sucediendo y puede que te esté mintiendo.
